Texto traducido del borrador (http://dsm5.org/) del Manual
Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales (DSM-5)
en su revisión de 26 de enero de 2011.
299.00 Trastorno Autista
Trastorno del Espectro Autista
Debe cumplir los criterios A, B, C y D:
- Déficits persistentes en la comunicación y en la interacción social
en diversos contextos, no atribuibles a un retraso general del
desarrollo, manifestando simultáneamente los tres déficits siguientes:
- Déficits en la reciprocidad social y emocional; que pueden
abarcar desde un acercamiento social anormal y una incapacidad para
mantener la alternancia en una conversación, pasando por la
reducción de intereses, emociones y afectos compartidos, hasta la
ausencia total de iniciativa en la interacción social.
- Déficits en las conductas de comunicación no verbal que se usan
en la comunicación social; que pueden abarcar desde una comunicación
poco integrada, tanto verbal como no verbal, pasando por
anormalidades en el contacto visual y en el lenguaje corporal, o
déficits en la comprensión y uso de la comunicación no verbal, hasta
la falta total de expresiones o gestos faciales.
- Déficits en el desarrollo y mantenimiento de relaciones adecuadas
al nivel de desarrollo (más allá de las establecidas con los
cuidadores); que pueden abarcar desde dificultades para mantener un
comportamiento apropiado a los diferentes contextos sociales, pasando
por las dificultades para compartir juegos imaginativos, hasta la
aparente ausencia de interés en las otras personas.
- Patrones de comportamiento, intereses o actividades restringidas y repetitivas que se manifiestan al menos en dos de los siguientes puntos:
- Habla, movimientos o manipulación de objetos estereotipada o
repetitiva (estereotipias motoras simples, ecolalia, manipulación
repetitiva de objetos o frases idiosincráticas).
- Excesiva fijación con las rutinas, los patrones ritualizados de
conducta verbal y no verbal, o excesiva resistencia al
cambio (como rituales motores, insistencia
en seguir la misma ruta o tomar la misma comida, preguntas repetitivas o
extrema incomodidad motivada por pequeños cambios).
- Intereses altamente restrictivos y fijos de intensidad desmesurada
(como una fuerte vinculación o preocupación por objetos inusuales y por
intereses excesivamente circunscritos y perseverantes).
- Hiper o hipo reactividad a los estímulos sensoriales o inusual interés
en aspectos sensoriales del entorno (como aparente indiferencia al
dolor/calor/frío, respuesta adversa a sonidos o texturas específicas,
sentido del olfato o del tacto exacerbado, fascinación por las luces o
los objetos que ruedan).
- Los síntomas deben estar presentes en la primera infancia (pero
pueden no llegar a manifiestarse plenamente hasta que las demandas
sociales exceden las limitadas capacidades).
- La conjunción de síntomas limita y discapacita para el funcionamiento cotidiano.
Fundamentos
Nuevo nombre para la categoría, el trastorno del espectro autista, que
incluye el trastorno autista (autismo), el trastorno de Asperger, el
trastorno desintegrativo de la infancia y el trastorno generalizado del
desarrollo no especificado de otra forma.
- La diferenciación entre el trastorno del espectro autista, el
desarrollo típico y otros trastornos sin-espectro, se hace de forma
fiable y con validez; mientras que las distinciones entre los trastornos
han demostrador ser inconsistentes a lo largo del tiempo, variables entre
un sitio u otro, a menudo asociadas con la severidad, el nivel de
lenguaje o de inteligencia en lugar de características del
trastorno.
- Como el autismo se define por un conjunto de comportamientos, se
representa mejor como una única categoría diagnóstica que se adapta a la
presentación clínica de cada persona, con la inclusión de
especificaciones clínicas (por ejemplo, la gravedad, habilidades verbales
y otros) y las características asociadas (por ejemplo, trastornos
genéticos conocidos, epilepsia, discapacidad intelectual y otros). Un
solo trastorno del espectro es un mejor reflejo del estado de los
conocimientos sobre la patología y la presentación clínica; previamente,
los criterios eran equivalentes a tratar de
trocear una pastel de carne
siguiendo las articulaciones
.
Tres dominios se reducen a dos:
- Déficits sociales y de comunicación.
- Intereses fijos y comportamientos repetitivos.
- Los déficits en la comunicación y el comportamiento social son
inseparables, y se pueden considerar de forma más precisa como un único
conjunto de síntomas con especificidades ambientales y
contextuales.
- Los retrasos en el lenguaje no son únicos ni universales en los TEA, y
con más precisión pueden considerarse como un factor que influye en los
síntomas clínicos de los TEA, en lugar de definir el diagnóstico de
TEA.
- Requerir que se cumplan ambos criterios completamente mejora la
especificidad del diagnóstico sin menoscabo de la sensibilidad.
- Proporcionar ejemplos de los subdominios de un rango de edades
cronológicas y los niveles de lenguaje aumenta la sensibilidad a través
de los niveles de severidad de leve a más grave, mientras que mantiene la
especificidad con sólo dos dominios.
- Decisión basada en el análisis de la literatura, las consultas de
expertos, y las discusiones de grupo de trabajo; confirmada por los
resultados de los análisis secundarios de datos de
CPEA
y STAART, de la
Universidad de Michigan, y de la colección de bases de datos de Simons
Simplex.
Diversos criterios sociales y de comunicación se han fusionado y
simplificado para aclarar los requisitos de diagnóstico.
- En el DSM-IV, múltiples criterios evalúan el mismo síntoma y, por
tanto tienen un peso excesivo al emitir el diagnóstico.
- La fusión
de los dominios sociales y de comunicación requiere un nuevo enfoque de
los criterios.
- Se realizaron análisis secundarios de datos sobre los síntomas sociales
y de comunicación para determinar las agrupaciones mas sensitivas y
específicas de síntomas y descripciones de los criterios para una gama de
edades y niveles de lenguaje.
Exigir dos manifestaciones de síntomas para los comportamiento
repetitivos y los intereses fijos mejora la especificidad del criterio sin
disminuciones significativas en la sensibilidad. La necesidad de múltiples
fuentes de información, incluyendo la observación clínica y los informes
especializados de los padres/cuidadores/profesores se destaca
por la necesidad de satisfacer una mayor proporción de criterios.
La presencia, a través de la observación clínica y el informe del
cuidador, de una historia de intereses fijos, rutinas o rituales y las
conductas repetitivas aumenta considerablemente la estabilidad en el tiempo
de los diagnósticos del espectro del autismo, y la diferenciación entre el
TEA y otros trastornos.
La reorganización de los subdominios aumenta la claridad y continúa
proporcionando una sensibilidad adecuada al tiempo que mejora la
especificidad mediante la provisión de ejemplos de distintos grupos de edad
y niveles de lenguaje.
Se incluyen explícitamente comportamientos sensoriales inusuales dentro
de un subdominio de comportamientos motores y verbales estereotipados,
ampliando la especificación de distintas conductas que pueden ser
codificadas dentro de este dominio, con ejemplos especialmente relevantes
para los niños más pequeños.
El Trastorno del espectro autista es un trastorno del desarrollo
neurológico y debe estar presente desde la infancia o niñez temprana, pero
puede no ser detectado hasta más tarde debido a mínimas demandas sociales y
al apoyo en los primeros años de los padres o cuidadores.
Severidad
Niveles de severidad para el Trastorno del Espectro Autista
|
Comunicación social |
Intereses restringidos y conductas repetitivas |
Nivel 3: “requiere soporte muy substancial” |
Severos déficits en habilidades de comunicación social verbal y no
verbal causan severas discapacidades de funcionamiento; muy limitada
iniciación de interacciones sociales y mínima respuesta a las
aproximaciones sociales de otros. |
Preocupaciones, rituales fijos y/o conductas repetitivas
interfieren marcadamente con el funcionamiento en todas las esferas.
Marcado malestar cuando los rituales o rutinas son interrumpidos;
resulta muy difícil apartarlo de un interés fijo o retorna a el
rápidamente. |
Nivel 2: “requiere soporte substancial” |
Marcados déficits en habilidades de comunicación social verbal y
no verbal; aparentes discapacidades sociales incluso recibiendo
apoyo; limitada iniciación de interacciones sociales y reducida o
anormal respuesta a las aproximaciones sociales de otros. |
Rituales y conductas repetitivas y/o preocupaciones o intereses
fijos aparecen con suficiente frecuencia como para ser obvios al
observador casual e interfieren con el funcionamiento en variados
contextos. Se evidencia malestar o frustración cuando se interrumpen
rituales y conductas repetitivas; dificultad a apartarlo de un
interés fijo. |
Nivel 1: “requiere soporte” |
Sin recibir apoyo, déficits en comunicación social causan
discapacidades observables. Tiene dificultad al iniciar interacciones
sociales y demuestra claros ejemplos de respuestas atípicas o no
exitosas a las aproximaciones sociales de otros. Puede aparentar una
disminución en el interés a interaccionar socialmente. |
Rituales y conductas repetitivas causan interferencia
significativa con el funcionamiento en uno o más contextos. Resiste
intentos de otros para interrumpir rituales y conductas repetitivas o
ser apartado de un interés fijo. |