Ya tenemos resultados de la propuesta anunciada el mes pasado (esta es la nota de prensa de la Federación Asperger España (http://www.asperger.es)):
El Congreso aprueba por unanimidad la elaboración de la Estrategia Nacional para las Personas con Trastorno del Espectro del Autismo
- La alta prevalencia, la dificultad de inserción laboral, la especificidad y la heterogeneidad de las personas con TEA justifican una estrategia específica del autismo.
- La iniciativa, que se llevo al pleno a instancias del Grupo Popular, ha sido resultado del trabajo conjunto de las tres entidades representativas del autismo a nivel estatal: Confederación Autismo España, Federación Asperger España (FAE) y Confederación Española de Autismo (FESPAU).
Madrid, 19 de noviembre de 2014.- El Congreso de los Diputados aprobó ayer, con el respaldo unánime de todos los grupos parlamentarios, la elaboración de una Estrategia Nacional específica para Personas con Trastorno del Espectro del Autismo (TEA) que contemple protocolos de atención en el ámbito de la sanidad, la educación, el empleo, la vida adulta, la vivienda, y la calidad y sostenibilidad de los servicios.
Para las tres entidades, la aprobación de esta estrategia responde a una “demanda histórica del movimiento asociativo del autismo que permitirá avanzar en la igualdad de oportunidades y en el disfrute efectivo de los derechos de las personas con TEA”; un colectivo con un índice de prevalencia qua ha aumentado significativamente en los últimos 40 años, y que se sitúa en 1 caso por cada 150 nacimientos (estudio de Autism-Europe aisbl 2012), y que cifrarían en 350.000 el número de personas con TEA en España. Una cifra que se eleva al millón si incluimos a las familias, cuya calidad de vida se ve directamente afectada.
Otra circunstancia significativa para el movimiento asociativo del autismo es la relativa al empleo que sitúa a las personas con TEA como uno de los colectivos con mayores dificultades de inserción laboral, por debajo incluso de la media del resto de discapacidades.
Estas circunstancias, sumadas a la especificidad y heterogeneidad que presentan las personas con TEA, justifican una estrategia específica que les dote a ellos/as y sus familias de medidas y recursos específicos que garanticen la igualdad de oportunidades y respondan a las necesidades individuales de cada persona a lo largo de su ciclo vital.
La estrategia recogerá, en el ámbito de la salud, medidas de detección precoz de los TEA y acceso a un diagnóstico e intervención especializados. En el aspecto educativo, medidas que garanticen la inclusión escolar y el éxito educativo del alumnado con TEA mediante la especialización, innovación y flexibilización de las modalidades de escolarización a lo largo de todas las etapas de la vida. En lo que se refiere al empleo y vida adulta, medidas que garanticen una oferta flexible y especializada de recursos y servicios (formación y capacitación laboral, atención diurna, etc.). Y, por último, medidas que aseguren la calidad y sostenibilidad de los apoyos facilitados, sin que se produzcan retrocesos en los estándares obtenidos.
El término Trastorno del Espectro del Autismo hace referencia a un conjunto amplio de condiciones que afectan al neurodesarrollo y al funcionamiento cerebral, dando lugar a dificultades en la comunicación e interacción social, así como en la flexibilidad del pensamiento y de la conducta. Es decir, los TEA no son un trastorno sino múltiples trastornos complejos que afectan al desarrollo del sistema nervioso central y al funcionamiento cerebral y que acompañan a la persona a lo largo de toda su vida, aunque sus manifestaciones y necesidades cambian en función de las distintas etapas del desarrollo. En la edad adulta, las personas con TEA, sufren además alteraciones de salud mental (el 34 por ciento), ansiedad (el 65 por ciento), y depresión (el 75 por ciento).